jueves, 11 de agosto de 2016

Drama III

Esta última sesión fue un poco diferente a las anteriores, en vez de hacer un precalentamiento todos juntos, el grupo 3 se quedó en la sala preparando una presentación, mientras los demás jugábamos afuera a un juego que consistía básicamente en tocar y decir un nombre. 
Cuando después de una hora entramos a ver al grupo 3, nos encontramos con una "obra" que estaba muy bien armada. Lograron coordinar muy bien todas las escenas que tenían cada uno desde antes. Además se notaba cuando estaban en el escenario que subían con mucho menos miedo que los del grupo 1 o el mismo grupo 2. Porque bueno, el grupo 3 ya sabía como era esto, ya sabía a lo que iba. Llevaban un poco más de confianza.
Con esto terminaron las sesiones de drama y también las clases vivenciales de este ramo. Así que esta es la ultima entrada sobre alguna clase de ETO I. A pesar de todo, fueron buenas clases, sobre todo muy diversas.

Drama II

De nuevo, empezamos todos con ejercicios para soltar nuestros cuerpos y de vocalización. Luego el grupo 1 hizo una improvisación grupal que había quedado pendiente de la clase anterior y luego fue el turno del grupo 2.
Partimos en el escenario con una fiesta, teníamos que improvisar como invitados de la fiesta. Fue difícil por dos cosas: éramos muchos en el escenario y a casi nadie se le ocurría que decir. Pero de cierta forma fue algo divertido.
Después fue una especie de improvisación individual, cada uno salía al escenario y gritaba algo. Lo que quisiera. Era un momento para descargarse. No sabía qué decir, así que no salí al escenario.
Es raro, porque siento que me hubiera dado lo mismo gritar algo si me hubieran dicho que gritar, pero pidieron que nos decargáramos y gritáramos lo que quisiéramos. Y la verdad, no quise gritar, no supe qué gritar

Al final, el profesor invitado nos dio por parejas una frase para que preparáramos un diálogo para la siguiente sesión.

Drama I

Como a la gran mayoría de las clases de este ramo, este día llegué sin saber qué esperar. Había un profesor invitado, actor, que se encargó de las siguientes clases también. 
Partimos con ejercicios para soltar nuestros cuerpos y nuestras cuerdas vocales. Después nos dividieron en tres grupos, para organizar lo que sería la segunda parte de la clase. Quedé en el grupo 2.
Este día se empezó con el grupo 1 en el escenario. Partieron con un ejercicio de improvisación y me sentí muy agradecido de no ser de su grupo. Había un cuadrado dividido en cuatro sectores donde la persona que entraba a cierto sector tenía que improvisar siguiendo las reglas del sector (no hablar, bailar, hablar, vocalizar), fueron varias rondas de esto y cada una fue mejor que la anterior, se volvía muy notorio como el grupo 1 se iba afiatando y logrando improvisaciones cada vez más coordinadas. Hasta que las dos últimas rondas resultaron buenísimas.
Luego vino una especie de “dinámica” de la micro. Fue muy divertido ver como mis compañeros reaccionaban y se iban metiendo en distintos personajes.